En la Edad Media, las franquicias nacieron como parte del privilegio que los soberanos les otorgaban a sus feudatarios para llevar a cabo actividades de pesca o caza, este tipo de autorizaciones se les conocía como Franc, de igual manera la Iglesia Católica le permitía a un determinado número de propietarios, tierras para que actuaran en su nombre y así recogieran los diezmos que se le otorgaban a la iglesia, consintiendo que un porcentaje fuera destinado a estos nobles hombres que realizaban tal acción.
Pasada la Revolución Francesa, desaparecieron estos privilegios que se les otorgaban a los nobles, así con ellos también desapareció la palabra. Sin embargo, para el siglo XIX reaparece en los Estados Unidos de América, reconociendo la palabra al otorgarle a personas particulares el permiso para el uso de explotación de diversos servicios públicos, tales como los ferrocarriles y bancos. Para la década de 1850 a 1860, Issac Singer logró darle solución a los problemas que tenía con su empresa y a la distribución de sus máquinas restructurando su funcionamiento y logrando con ello, sembrar las bases del actual sistema de franquicias, consiguiendo ser para ese momento una franquicia de producto y marca. Es por ello que a Singer se le recuerda en relación con el origen de la palabra.
No fue sino hasta la Segunda Guerra Mundial que el sistema de franquicias creció aceleradamente debido a que los soldados que regresaban de la guerra no podían posicionarse en un nuevo trabajo y así incorporarse nuevamente a la sociedad, ya que no contaban con conocimientos comerciales, ni una formación profesional. Esto provocó que la mayoría, al contar con capital, se pudiera incorporar y poner en marcha el régimen de franquicia, garantizando el asesoramiento de profesionales con mayor experiencia en la materia.
Gracias a estos antecedentes, diversas empresas se han logrado expandir con este sistema, ya que por lo general, quien compre los derechos de una franquicia tiene un 100% de éxito. Desde la industria alimenticia hasta la farmacéutica se han apoyado en este sistema, logrando crecer sus activos. Instituciones financieras han evaluado a muchas franquicias, apoyando su sistema, ya que pudieron crecer en corto y largo plazo sin importar los problemas económicos con los que el país se encuentre, comprobando que una franquicia puede crear nuevos empleos y apoyar al crecimiento económico de la zona en la que se ponga.
En nuestro país, una franquicia con un óptimo plan de negocios puede llegar a tener éxito, esto se puede apoyar con una buena campaña de marketing para posicionar la marca con la que se haga el contrato de franquicia, el éxito asegurado es sin lugar a dudas una de las tantas ventajas que una franquicia puede proporcionar.
En el país se han abierto oportunidades de negocios rentables desde los cuales la economía se ha visto estimulada de forma positiva. En México, es importante que una marca transfiera conocimientos técnicos y proporcione asistencia para que, quien quiera hacer uso de una licencia, pueda vender, producir o prestar los servicios de manera eficiente. Es primordial que los dueños de las marcas se mantengan en constante supervisión o asesoramiento del nuevo representante de la marca, con la intención de no perder los estándares con los que se han impuesto en el contrato y lograr un mutuo beneficio, por eso este tipo de contratos ostentan popularidad y crecimiento acelerado.
Se debe tomar en cuenta que no todas las marcas son ideales para firmar un contrato de franquicia, pues sus productos muchas veces no están bien posicionados y esto puede llegar a ser una de las principales causas para que las personas que piensan en comprar una franquicia no se animen al final de todo. Sin embargo, no todo en el mercado esta mal posicionado, existe un sinfín de marcas que cuentan con la experiencia suficiente para poder entregar sus contratos de franquicia sin llegar a ser un fracaso. Las ventajas de adquirir una franquicia son realmente claras, ya que para poder hacer este tipo de contratos se realizan investigaciones de mercado para saber si la zona en la que se pretender posicionar la franquicia tiene las condiciones adecuadas para poder ser un éxito rotundo.
En Respuesta Rápida contamos con cuatro diferentes tipos de franquicias, las cuales son: la franquicia básica, franquicia territorial, franquicia master y la franquicia de conversión. Nuestra marca ha podido desarrollarse gracias a nuestros años de experiencia y trabajo constante, así como un plan de negocios, el cual le asegura resultados efectivos a corto plazo. Le brindaremos la información necesaria para que pueda decidir qué tipo de franquicia está dispuesto a adquirir, ya que nuestro equipo está capacitado para orientarlo en todo momento. Así también, nuestro equipo de marketing le ayudará a saber cuáles son las acciones a seguir en el momento que usted adquiera la franquicia que más le convenga, sobre todo porque estamos comprometidos con el éxito que usted puede obtener.
Con nosotros tendrá en todo momento asesoría personalizada para la zona en la que usted se posicione, además de que para nuestra empresa usted es parte de nuestro equipo y juntos diseñaremos el plan de negocios que más se adecue a la necesidades que se le vayan presentando. Nuestros inversionistas desde la adquisición de la franquicia que más les ha interesado, no están solos, pues nuestro equipo estará disponible para cuando usted lo necesite. En Respuesta Rápida estamos comprometidos en solucionar los problemas que usted tenga de forma inmediata, ya que el éxito que podamos tener es compartido y en todo momento estaremos disponibles para apoyarle. Somos la mejor opción para que usted invierta con nosotros.
