Muchas veces hemos escuchado el término de sistema de casa de empeño, sin embargo, es posible que se caiga en confusiones debido a que no sabemos exactamente en qué consisten, cómo funcionan y en qué circunstancias es benéfico acudir a este tipo de servicios.
Es por ello que en Respuesta Rápida nos hemos dado a la tarea de crear una serie de artículos relacionados con nuestra empresa, con el fin de que todos nuestros visitantes tengan a su alcance toda la información que necesitan al acudir a una de nuestras más de 150 sucursales en todo el territorio mexicano. En ese sentido, a continuación explicaremos de qué trata uno de los más de 10 servicios que ofrecemos: el crédito prendario.
Las crisis económicas son comunes entre toda la población, sin importar el nivel socioeconómico que se tenga, siempre hay ocasiones en las que una familia tiene que recurrir a préstamos de dinero para salir de algún problema. Existen muchas personas que solicitan créditos bancarios para realizar alguna inversión fuerte, ya sea para adquirir bienes como un automóvil o una casa, o incluso para irse de viaje.
Además de los créditos que son proporcionados por las instituciones bancarias, éstas también otorgan tarjetas de crédito, que consisten en una cierta cantidad de dinero disponible en una cuenta, mismo que se puede utilizar para adquirir todo tipo de bienes y servicios, o simplemente pagar los gastos que surjan de alguna emergencia. En ambos casos, se tiene que devolver la cantidad de dinero prestada por el banco más un monto equivalente a la tasa de interés establecida por esta misma institución, en un periodo de tiempo determinado al firmarse el contrato.
Ahora bien, para que una persona tenga acceso a los créditos que todos los bancos ofrecen, es necesario cumplir con una serie de requisitos, entre los que se encuentran: tener solvencia económica, demostrar con comprobantes los ingresos mensuales de la persona que lo solicita, un buen balance crediticio (que se pueda comprobar que se ha pagado de manera puntual con anterioridad), llenar una solicitud de préstamo y tener un consignatario, es decir, una persona con un excelente historial crediticio que se comprometa a responder por el solicitante del préstamo.
Una vez que se haya cumplido con estos y más requisitos (los cuales pueden variar dependiendo del banco), la institución financiera tiene que evaluarlos, trámite que puede durar varios días, posteriormente, ésta le informa a la persona interesada si su solicitud fue rechazada o aprobada; en caso de que sea aprobada, el solicitante todavía tiene que esperar unos días más para cobrar el préstamo.
Hasta aquí todo parece muy sencillo, sin embargo, hay personas que en un caso de emergencia no pueden esperar la duración que tiene el proceso de solicitud, que puede ser de varios días e incluso semanas. Además, el conseguir un aval puede ser una tarea muy difícil, aunada al hecho de que todas las personas que no tienen un comprobante de ingresos fijos quedan totalmente descartadas por la institución bancaria.
Entonces, ¿qué se puede hacer cuando no se puede recurrir al banco para obtener un préstamo de manera rápida y segura? Ante la problemática que tiene la mayor parte de la población mexicana de conseguir un crédito bancario, se popularizó el sistema de casa de empeño, mismo que será explicado de manera breve a continuación.
Una casa de empeño es un local comercial que se dedica al préstamo de dinero, al igual que un banco, pero tiene una serie de diferencias: no se necesita tener un ingreso mensual mínimo y el proceso dura unos minutos, ya que el interesado acude a dicha sucursal con una prenda, es decir, un objeto de valor que le dará a la casa como garantía de su pago, entonces, un valuador revisará el artículo y fijará el valor del préstamo.
Ya que se fijó la cantidad de dinero que se le va a otorgar al solicitante, el empleado de la casa de empeño le informará el plazo en el que se va a liquidar la deuda, más la cantidad que se debe pagar por los intereses. Además, es su obligación explicar de manera clara las razones por las que el solicitante podría perder su objeto de valor, por ejemplo, la falta de pago en el plazo estipulado en el contrato.
Entre los artículos que se pueden empeñar en un negocio de este tipo están: anillos, aretes, collares y cualquier pieza de joyería, dispositivos electrónicos (televisores, consolas de videojuegos, celulares, computadoras, equipos de sonido), instrumentos, bicicletas y hasta automóviles, dependiendo de la institución de la que se trate.
En caso de que la persona que tramitó el préstamo no cumpla con el contrato, entonces la casa de empeño se quedará con el bien que se dejó en garantía, y lo pondrá a la venta para recuperar su inversión. Afortunadamente existe cierto margen de flexibilidad por parte de estas instituciones, ya que se puede negociar el pago de un refrendo si no se puede liquidar la totalidad de la deuda en el tiempo estipulado.
Las ventajas del sistema de casa de empeño son muchas, entre ellas está la rapidez del trámite, la flexibilidad, la capacidad de tener dinero al instante sin tantos requisitos y facilidades de pago, entre otras. Si en algún momento te encuentras en la necesidad de un préstamo de manera rápida, entonces acércate a Respuesta Rápida, la casa de empeño que cobra los intereses más bajos en el mercado, es segura y confiable.
